La liga china arranca con fichajes galácticos
Lavezzi, Jackson, Guarín y Gervinho , entre los detacados.
La Superliga de fútbol china comienza este fin de semana una nueva temporada con unos fichajes estratosféricos que han reventado el mercado de invierno europeo y el aliciente de seguir viendo en ella al español Gregorio Manzano, quien tras dos años entrenando en Pekín ahora probará suerte en la rival Shanghái.
El argentino Ezequiel Lavezzi, los colombianos Jackson Martínez y Fredy Guarín o el marfileño Gervinho son algunas de las grandes novedades de la competición, que en los últimos cinco años ha sido ganada por el Guangzhou Evergrande pero este año podría estar más abierta, a la vista de las fuertes inversiones de sus rivales.
"En principio, parece que va a ser una liga muy competida", destacó a Efe Manzano, quien vaticinó que el grupo de equipos que lucharán por los puestos de cabeza será mayor que en otros años y expresó su esperanza de que su nuevo club, el Shanghai Shenhua (sexto en la pasada temporada) esté en esa pomada.
A los favoritos en temporadas anteriores, como el Evergrande, el Beijing Guoan (que Manzano entrenó en 2014 y 2015), el Shanghai SIPG y el Shandong Luneng, se les pueden unir en 2016 otros clubes en ascenso "como el Jiangsu Suning, el Hebei Fortune o nosotros", señaló el jienense en referencia al Shenhua.
El Evergrande, entrenado desde el pasado año por el brasileño Luiz Felipe Scolari y que también es el vigente campeón de la Liga de Campeones asiática, es en todo caso el gran favorito, pese a haber perdido a una de sus estrellas, el delantero brasileño Elkeson, fichado por el Shanghai SIPG de Sven-Goran Eriksson.
Para paliar la marcha Elkeson al a priori gran rival (el SIPG fue subcampeón en 2015), el Evergrande acudió por primera vez a la liga española y adquirió en febrero al que el pasado verano fuera fichaje estrella del Atlético de Madrid, el delantero colombiano Jackson Martínez, por 42 millones de euros.
Esta temporada, sin embargo, son dos equipos aparentemente modestos, el Jiangsu Sainty y el Hebei Fortune, los que han causado mayores sorpresas en el mercado de fichajes chino.
El Jiangsu, dirigido por el rumano Dan Petrescu, se ha traído por 50 millones de euros (récord nacional y uno de los 20 fichajes más caros en la historia del fútbol mundial) al centrocampista Alex Teixeira, y desembolsó 28 millones más por su compatriota Ramires, cifras sólo comparables a las de los grandes equipos del fútbol europeo.
El Hebei Fortune, recién ascendido a primera división, ha gastado considerablemente menos pero ha conseguido atraer a futbolistas de fama como Lavezzi, Gervinho, el camerunés M'bia o el francés Kakuta.
Otros equipos a tener en cuenta son el Shandong Luneng, tercero el año pasado y que ha reforzado su defensa con el brasileño Gil (ex del Levante), o el Beijing Guoan, que ha "desguazado" al Corinthians, último campeón de la liga brasileña, con el fichaje de sus estrellas Renato Augusto y Ralf.
Ambos clubes han cambiado también sus banquillos: el Luneng ha contratado al exseleccionador brasileño Mano Menezes, y el conjunto pequinés ha suplido la marcha de Manzano con el italiano Alberto Zaccheroni, a quien tras entrenar a todos los grandes equipos transalpinos y a la selección japonesa le espera un gran reto.
Manzano, por su parte, llega a un equipo con hambre de victorias (su último título data de 1995) pero que también se ha reforzado con figuras como Guarín en el centro de campo o el nigeriano Obafemi Martins en la delantera.
"En principio intentaremos mejorar el sexto puesto del año pasado, y una vez superado intentaremos llegar a puestos de Champions (los tres primeros), que estarán muy disputados esta temporada", señaló Manzano como principales objetivos de cara a la competición.
Ésta, de 30 jornadas y que para esquivar el extremo invierno del norte de China se disputa cada año entre primavera y otoño, se abre hoy con un partido adelantado (Guangzhou R&F-Hebei Fortune), finalizará el 5 de noviembre y se espera que este año, con los millonarios fichajes, atraiga más espectadores que nunca.
"La llegada de jugadores de renombre y prestigio va a suponer que la atención mediática y las aficiones en los estadios se vayan incrementando, y eso es muy importante para el fútbol chino", analizó Manzano, uno de los pocos entrenadores extranjeros que ha entrenado dos equipos diferentes en esta liga.
EFE